Kamikaze

Cerca de 150 exponentes demostraron, ayer, sus condiciones en las arte marciales conocidas como: Muay Thai y Shooto, a nivel amateur y profesional. Este curioso deporte llamó la atención de varios aficionados que asistieron al coliseo Jorge Calvache para presenciar los combates.

Y es que la ciudad acogió el Torneo Nacional Hermandad Kamikaze de Muay Thai y Shooto, que se realiza cada tres meses en diferentes lugares del país. En esta ocasión se contó con la participación de 11 escuelas de Quito, Ibarra, Riobamba y Cuenca, que hoy en día tiene dos escuelas: Iron Fist Kamikaze y Kendo. Todas integran la Organización de Kamikaze, que tiene el aval del World Muay Thai Federation y Kru Muay Thai Association.

Andrés Cabrera, uno de los cuatro instructores de Iron Fist explicó que Muay Thai es un arte marcial original de Tailandia, que consiste en aplicar ocho articulaciones durante un combate: puños, codos, rodillas y tibias (canillas).

Uno de los datos que más llamó la atención entre el público, fueron los rituales que realizaban los oponentes antes de combatir dejándose llevar al ritmo de una melodía tailandesa. “Con esta danza conocida como wai kru se pretende una formación espiritual de encomendarse a un poder superior y de conducta, ya que todo golpe se realiza con respeto porque todos pertenecemos a la misma Organización y sobre todo porque uno de nuestros principios es amistad y prosperidad mutua (..) Personalmente cambié la visión de las artes marciales que son violentas.

Shooto

En cuanto al Shooto señaló que son artes marciales mixtas que utilizan técnicas de piso aplicadas en judo, lucha, jiu jitsu y los combates son en una jaula. Los agarres se realizan en las articulaciones y no en los trajes como kimonos.

Previo a la cita que tuvo el auspicio de la empresa privada y pública como: Etapa y Empresa Eléctrica Centro Sur, se procedió con los ascensos que son reconocidos por los organismos internacionales.

Cabrera, quien es psicólogo de profesión acotó que los combates ayudan a “desestresarse” y “mejorar la parte emocional y espiritual”.